SALA 1
Infraestructura económica, de transporte y militar

La cuestión del petróleo

El gobierno colonial de las islas otorga ilegítimamente desde 1996 licencias de exploración y explotación petrolífera a empresas británicas con participación de capitales norteamericanos (asociados a capitales monopólicos locales) en las áreas marítimas circundantes, a cargo de las empresas Desire Petroleum, Rockhopper Exploration, BHP Billiton, Falkland Oil and Gas Ltd, Argos Resources y Borders & Southern Petroleum. Si bien todavía no han extraído petróleo en cantidad y calidad comercialmente viable se estima que próximamente estarán en condiciones de hacerlo. Gran Bretaña realiza actividades ilegales de exploración de hidrocarburos desde 1975 a partir de los estudios geológicos realizados por la misión Shackleton enviada por la corona para estudiar las posibilidades económicas de las islas. La explotación comercial de hidrocarburos aumentaría aún más la capacidad financiera del gobierno colonial. Ese escenario potencial permitiría abonar la pretensión británica de transformar las islas en un próspero “proto-estado” autónomo, o incluso independiente, conforme a la falacia de la autodeterminación esgrimida, al tiempo que le permitiría a Gran Bretaña usufructuar de vastos recursos del alto valor estratégico y económico.